UN CARACOL EN CHINA

El martes me junte con unos españoles que me dijeron que iban hacer un treking por los campos de Arroz y en que mala hora se me ocurrió apuntarme.
Yo creía que eran 15 kms bordeando un río y visitando un sitio donde observar los campos de arroz y de eso nada. Pero vayamos desde el principio.

Salimos cinco, todos Españoles a la estación de autobuses y allí contratamos un taxi.
El viaje fue por unas carreteras malísimas llenas de baches y curvas cerradas.
Ahí ya tuve mi primera mala experiencia , nos toco parar por un accidente. Ya cuando pudimos avanzar vimos qué el accidente era un choqué semi frontal entre un autobús y un coche,  nos toco ver al hombre del coche tirado en la carretera muerto.

Después de eso y con el mal cuerpo que te deja continuamos.
Llegamos a un parking y compramos agua.
Empezamos andar y yo no se porque no podía tirar, si es cierto que el camino no era llano y tenia fuertes subidas y no se porque pero el cuerpo no me respondía, aun me sigo preguntando el pregunto porque.
Si porque no estoy en forma (otras veces he hecho paseos parecidos), por que había cenado muy poco y hacia muchas horas y no había desayundo o por el cocktel de pastillas que tomo en especial el sumial, o el tiempo que hacia 32 grados y 90% humedad, el caso es que no podia andar.

Lo peor de eso es que retrasaba al grupo. Todo esto fue torciéndose y encima nos llovió mogollón durante mas de media hora. El grupo se porto genial al negarse a dejarme atrás pero yo veía que no les estaba sentando bien y eso me frustraba y me hacia estar peor. El colmo fue que se nos hizo de noche y al final poco a poco ayudado por móviles conseguímos bajar.
Justo antes de entrar a una pista forestal me resbale y me caí y mi rodilla dio contra una piedra, pero como de momento no dolía a duras penas conseguí llegar abajo.

Pero ahí no acaba todo,al llegar a la ultima casa yo decidí no parar y seguir con otro qué me acompañaba bajando y se sumó su amigo.
Total que llegamos abajo y el taxista nos estaba esperando. Empezamos a esperar y de los otros dos ni rastro. El taxista subió a mirar por la pista y nada. Casi dos horas mas tarde y habiendo una posibilidad de que cogieran otro sendero y fueran a un pueblo cercano decidimos regresar.
Llegamos cerca de la una de la mañana. Fuimos ha cenar los tres que quedábamos y después a dormir. Cosa que debido a el dolor y lo mal que me sentía me costó...